Apenas al llegar, se podia sentir la emoción de la gente. Miles y miles de personas reunidas para ver cantar a sus artistas favoritos, porque qué mejor que verlos cantar a todos juntos? La fila era interminable, la espera larga, pero el día apenas comenzaba y todos estaban aún llenos de energía y ánimo. La energía iría bajando a lo largo del día, pero el ánimo siempre estuvo presente.
Después de varias horas de espera, comenzó el concierto. Las primeras bandas eran poco (o nada) conocidas, bastante amateurs, pero solo eso sirvió para que todo el mundo se prendiera y esperara de manera más animada. Los mejores artistas venían en camino.
A mi parecer, el verdadero concierto comenzó con el grupo Airbag. No a todos les gustaba (a mi no), pero tenía sus fanáticos que compensaron a saltar y cantar. Después llegó el cantante Pablo Aznar. Un músico exelente pero lamentablemente no tenía mucho fanáticos, o muchos conocian sus canciones pero recién se enteraban que era él quien las cantaba. Si la vida es justa, pronto lo veremos en las grandes ligas.
La que le siguió, y la primera artista verdaderamente importante, fue Paulina Rubio, que llegó con todas las pilas puestas a cantar y bailar, y terminar de encender a los pocos que quedaron apagados hasta ese momento. No cantó nada menos de grandes éxitos, como “Lo haré por tí” y “Todo mi amor”, un pedacito de “Nada de esto fue un error”, y mi favorita, “Yo no soy esa mujer”, que siempre da gusto un artista que no le moleste cantar sus viejos y clásicos éxitos. Con su look retro y brillante, esta carismática mujer nos hizo cantar a todo pulmon.
El piano que había sido colocado en el centro del escenario al comienzo de todo fue después usado para la presentación de Alejandro Lerner. Un tanto más corta que las otras, pero igual de buena. Aparte de una primera canción dedicada a los niños, cantó sus temas más conocidos que todo el mundo coreaba con alegría. Solo él y su piano, era lo único que se necesitaba.
Casi sin intorrupción, salió a cantar después Jorge Drexler. La major parte de su presentación fue, se podría decir, su “introducción”, donde cantó la canción ganadora del Oscar “Al otro lado del Río” a capela. Y no que el resto de su interpretación fuera mala, pero sus canciones eran poco conocidas y sus letras algo bizarras, por lo que no se ganó mucha simpatía pero lamentablemente si muchas burlas.
A esto le siguió una de las partes más espectaculares del concierto. Salió al cabo de muchos minutos de preparativos Fito Paez, con su típico look desaliñado a cantarnos apenas una canción antes de que invitara a Andrés Calamaro a unírsele en la tarima. Comenzaron cantando “Crimen”, y juntos siguienron con varias otras canciones llenas de luces y de rock tan geniales como solo las podrían lograr dos ídolos como ellos.
Siendo su tipo de música tan debatable en tema de gustos, fue sorprendente cuan buena fue la presentación del “Calle 13”, un grupo de reggaeton puertorriqueño que puso a bailar a toda la concurrencia. Tenía muchos fanáticos que coreaban sus letras con mucho entusiasmo, pero aún si no las conocías era fácil dejarte innundar por las melodías. Un toque diferente al resto de los artistas, que le dio al público la posibilidad de bailar sin importar el reducido espacio con el que se contaba, lo único que importaba era el ritmo.
El siguiente cantante trajo consigo la hiseria, los gritos y los empujones de miles de fanáticos, que forcejeaban para verlo un poco más cerca. Me refiero a Alejandro Sanz, cantante lejendario y uno de los pilares en que se construyó el proyecto “Alas” que todos fuimos a celebrar. Arrancó las voces de todos sus fans mientras cantaba sus temas más clásicos, “Corazón Partido” y “Amiga Mía”.
Al poco tiempo, el público se deshizo en gritos cuando Sanz invitó al Segundo pilar del proyecto “Alas”, Shakira, a cantar su conocido tema “Te lo agradezco pero no”, el cual coreó todo el mundo tanto por ser una buena canción como por ver finalmente a Shakira, la artista que la mayoría esperaba con más ancias. Al terminar también con el dúo, los artistas invitaron al resto de compañeros que habían compartido con ellos el escenario toda la tarde y noche para cantar una versión bastante alterada de “No es lo mismo”, pero que quedó exelente con el propósito del concierto.
Pero después de eso, el público tuvo que esperar todavía un poco más antes de que Shakira volviera al escenario a hacer su parte del show, y hay que admitir que la espera valió la pena de sobra. Después del primer par de canciones, fue el turno de Shakira de tener sus propio invitados al escenarios. Nos trajo una vez más a Alejandro Sanz para cantar a dúo “La traición”, que todo el mundo cantó a todo lo que daba la gargantan. Ya a nadie le importaba la larga espera por la que habían
pasado.
Después de esto, Shakira sorprendió a muchas personas invitando a cantar al escenario a Mercedes Sosa, que aunque se sentía un poco fuera del lugar en el contecto del concierto, dejó a todos felices con su interpretación de “La Maza”, y dejó a Shakira brillando de felicidad ante la oportunidad de haber cantado con un clásico de la música folklórica.
Finalmente, el concierto concluyó, 7 horas después de haber empezado, con un dúo entre Sahkira y Gustavo Cerati, que dejó a todo el mundo aplaudiendo a más no poder. Luego, la gente empezó a salir despacio del enorme campo donde tomó lugar el concierto, todos cansados y hambrientos, pero felices de haber presenciado lo que realmente es un concierto, en todo el sentido de la palabra. Para mi por lo menos, fue el major concierto al que fui jamás.
2 comentarios:
Una corrección: con Fito no tocó Calamaro, tocó Cerati.
No soy muy fan de muchos de los artistas que estuvieron en el show (sí de Fito, que si bien no me gusta demasiado lo que está haciendo ahora, es uno de los grandes indiscutibles. Azanr también estuvo, y junto con Drexler, tal vez son los 3 que me hubiera copado ver) y además también soy bastante escéptica con respecto a estos hiper recitales (me pasó lo mismo en este sentido cuando vi el Live 8), pero la experiencia de ver semejante cantidad de gente disfrutando de la misma música, sea la que sea, indudablemente debió ser emocionante, no?
Completamente cierto. No mi primer megaconcierto, pero definitivamente disfruté este mucho más (excepto q en el anterior vi a Silvio Rodriguez... fue lo mejor!!!).
En todo caso, valió la pena, y q mejor q hacer estas cosas cuando todavía eres joven y los males se curan con una buena noche de sueño?
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